Pensar con cierta coherencia debe ser bastante difícil, ya que observamos en algunos nacionalistas (independentistas) una curiosa habilidad para reclamar el derecho a decidir y no vemos por ningún lado que les pretendan conceder el mismo derecho a las provincias o municipios de ese territorio que quisieran también ejercer el mismo derecho. Curiosa manera de actuar.
Otros van todavía más allá y no sólo reclaman su independencia, sino que además indican otras provincias que quieren anexionarse y que les acompañen obligatoriamente en su aventura. Hay nivel.
Los que se creen un poco más que los demás, los que se sienten más ricos, parece ser que no quieren compartirlo con nadie; un egoísmo insolidario muy bien disimulado.
Banderas, fronteras... siempre la misma insolidaridad, la misma inhumanidad.
martes, 29 de abril de 2014
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