Ver imágenes en "Faustino y los círculos de aire"

Etiquetas

jueves, 20 de diciembre de 2012

Buenos deseos


Después de la gran crisis decidieron que las siguientes fiestas del solsticio de invierno serían diferentes y pusieron todo su empeño en lograrlo.
Los mejores ingenieros calcularon y diseñaron los nuevos anillos de la Tierra (muy parecidos a los de Saturno, todo hay que decirlo) y les salieron maravillosos; además podían ser observados desde cualquier punto del planeta.
Otros decidieron  escribir los más hermosos cuentos que llenasen de respeto y de esperanza a los seres que a veces se olvidaban de su naturaleza sensible y humana.
Los más generosos dedicaron sus esfuerzos a ayudar a elevar el nivel y el número de los colibríes, para infundir gracia y altura a todas las decisiones.
Más tarde, un grupo reducido de seres colocaron en emplazamientos emblemáticos del universo algunos móviles de Calder, tan raros como excelsos y maravillosos.

A esas noches y a esos días se les llama, con razón, buenos.


  
 http://www.lamalla.cl/%C2%BFanillos-en-la-tierra/

1 comentario:

  1. En el novísimo planeta recién estrenado, una plétora de colibríes surfeaba los anillos remedo de los de Saturno y todos los terráqueos los confundían con estrellas fugaces: por su brillo cálido, su titilar deslumbrante, su vuelo errático en busca de lo inasible allá en la altura, su picoteo interpretable y la sinfonía del viento agitado por sus aleteos compulsivos. (Es sabido que los cuerpos celestes y plumíferos emiten sonidos que sólo los humanos tocados por la gracia escuchan; especialmente en noches de luna nueva, la bóveda del universo se ve invadida por un adagio maestoso y pianísimo de cellos temblorosos,cuyas cuerdas son frotadas por rayos de intensa luz y vibran en una frecuencia que no recogen los libros de física más eruditos).

    ResponderEliminar